Las primeras excavaciones del año revelan que existen más enterramientos en esta zona, donde ya en 2009 se descubrió el mayor cementerio árabe de Europa
El pasado verano salió a la luz que la mayor y más antigua necrópolis árabe de Europa se halla en el yacimiento arqueológico de Medina Elvira, un espacio único para estudiar la transición de la sociedad tardorromana a la musulmana (allá por el siglo VIII). En pleno siglo XXI, la zona se localiza entre los municipios granadinos de Atarfe y Pinos Puente y gran parte de la misma está en manos privadas e incluso urbanizada.
El pasado 21 de enero, siete meses después del descubrimiento de los primeros macroenterramientos, la III Campaña de Excavación que se realiza en la zona ha arrojado otra sorpresa. Y los investigadores que coordina Antonio Malpica, director del yacimiento y catedrático de Historia Medieval de la UGR, nuevamente andan ocupados en desenterrar las primeras estructuras y enterramientos de otra gran necrópolis diferente a la primera.
Barro y lluvias
Los trabajos actuales requieren retirar la capa de barro que se ha ido formando por las lluvias recientes. Aunque, afortunadamente, teniendo en cuenta las medidas de protección que se tomaron, «no ha habido un menoscabo de las estructuras y muy escasamente ha afectado a los niveles arqueológicos», explican miembros del proyecto.
Pocas dudas caben ya sobre la indiscutible importancia arqueológica del enclave, que se ha multiplicado continuamente desde que Gómez-Moreno fuera el primero en intervenir a finales del siglo XIX, cuando se descubrió una necrópolis cristiana en el llamado Pago de Marugán. Entonces se llegaron a señalar unas 1.200 tumbas, pero no se encontró la necrópolis árabe que apareció al sur del Pago de la Mezquita el pasado verano, cuando se calcularon más de 20.000 metros cuadrados de restos funerarios orientados hacia la Meca y datados del siglo IX. Las tumbas y los restos evidenciaban entonces el rito musulmán, con los cuerpos de costado y orientados hacia la Meca, al igual que los primeros restos descubiertos los dos últimos días.
A principios de 2010, además de un cuerpo prácticamente entero, se ha recuperado cerámica, vidriada en melado, en contacto con los huesos. Material de construcción y piedras de pequeño y mediano tamaño, además de una moneda que parece árabe. A pesar de que el júbilo de los investigadores es obvio y de la relevancia del hallazgo, ni el delegado de Cultura de la Junta de Andalucía, Pedro Benzal, ni Antonio Malpica quisieron hacer declaraciones a IDEAL sobre unos trabajos que, sin embargo, cuentan con un riguroso y actualizado seguimiento en la página web 'medinaelvira. org'; además de en el Facebook de Madina Ilbira, de donde proceden la fotos que ilustran esta información.
Los nuevos hallazgos podrían ser catalogados como Bien de Interés de Cultural (BIC), un tema que debatirán Pedro Benzal y el nuevo alcalde de Atarfe, Tomás Ruiz, el martes próximo, cuando acordarán también cómo completar el Plan Director para la zona. No obstante, los terrenos cuentan ya con una amplia extensión protegida, de 332 hectáreas, declaradas BIC en 2004.
Puesta en valor
Madinat Ilbira es una ciudad seguramente surgida a partir de un poblamiento campesino y tiene vestigios importantes de épocas romana y tardoantigua. En el siglo IX Abdehrraman II y Muhammad I construyeron su alcazaba y seguramente su mezquita mayor.
Hasta el momento no ha existido ninguna actuación de puesta en valor del yacimiento o de su difusión, una situación que deberá paliarse en un plazo razonable. No obstante, en los últimos años se está llevando a cabo un avance importante en el campo de la musealización de yacimientos arqueológicos entendiéndolos como un servicio social.
De partida, los investigadores entienden que el ámbito que debe ser objeto esta iniciativa abarca los límites físicos del yacimiento, perfectamente delimitado en el expediente de BIC: los vestigios de Madinat Ilbira.